miércoles, 19 de diciembre de 2012

Adiós, bellos recuerdos del pasado


Podríamos decir que esta perfomance operística trata sobre la violencia de genero en la Ópera. Pero teniendo en cuenta que nos quedaríamos en una propuesta obvia, prefiero decir que esta obra trata del conflicto de una mujer, soprano, consigo misma ante la belleza de las arias que temporada tras temporada ha cantado y las escenas de estas arias que ha tenido que representar. Historias por lo general, y en especial las de Verdi, donde las mujeres han sido rechazadas y maltratadas. Escenas propias de violencia de género. Un conflicto entre, como no, phatos y logos. LA MUJER solo tiene preguntas, pero no respuestas. Tal vez las encuentre en su público.



“Adiós, bellos recuerdos del pasado, rosas de mis
alegrías marchitas y el amor de Alfredo, del hombre,
todavía me falta. !Consuelo, sostén del alma
cansada! Compadécete del deseo de esta extraviada.
Perdóname y acógeme, Señor. Todo ha terminado ya.
Alegrías y dolores pronto acabarán. !Ni flores ni
lágrimas tendrán mi tumba! Ni una cruz con mi
nombre cubrirá en ella mis huesos... “
... y si hay un nombre no sería Violeta...no... ni
Mujer.. !!NO!!!, sería Sacrificio, sacrificio...
Porque no somos más que un retrato idealizado,
mostrándonos como un ser angelical ante vosotros...
los hombres.